16/08/14

El "berretín" de las cosas idas... María Passoni, un ejemplo de vida

 

Deseamos en este número, rescatar la personalidad de esa mujer que vivió en nuestro pueblo, hace algunas décadas, y que en el transcurso de sus 47 años de residencia, hizo de la amistad un culto y de su profesión un apostolado

 

 

Cuando de personas se trata, es saludable hablar de aquellos, que en su paso por la vida, nos legaron con su proceder, enseñanzas que nunca deberían caer en el olvido. Es por eso, que hurgando en amarillos papeles, en memorias y escritos, hemos podido obtener de nuestros archivos, un relato como el que en en esta publicación, hoy les podemos ofrecer...

Hay en Arroyo Seco una calle que hace ya varios años fue bautizada con la denominación de MARIA PASSONI. Nace perpendicular a Intendente Costantini, en la llamada curva de Medicina. Son unas pocas cuadras que costean el establecimiento fabril del "Barrio Versalles" en dirección al Río. Para algunos mayores, este nombre, tal vez, les resultará familiar. Para otros, más jóvenes, o radicados en los últimos tiempos en nuestra Ciudad, probablemente, les sea desconocido. Compartamos entonces el relato...




"Deseamos en este número, rescatar la personalidad de esa mujer que vivió en nuestro pueblo, hace algunas décadas, y que en el transcurso de sus 47 años de residencia en ésta, había hecho de la amistad un culto y de su profesión un apostolado. Los que la conocieron de cerca, supieron de sus dotes morales, de sus desvelos y de sus nobles preocupaciones.

Para rememorar la trayectoria de ella, trazaremos una ligera semblanza de sus rasgos más salientes, que la señalan como el prototipo del maestro argentino.

Nacida en Bell Ville (Córdoba), donde cursara sus estudios y se graduara, desde muy joven se traslada y se radica en Arroyo Seco, allá por el año 1914, juntamente con su inseparable compañera Mónica Leiría, pasando ambas a ejercer la docencia, desde el 1º de Marzo, en la Escuela Fiscal Nº 73.

Fallecida su amiga después de haber actuado juntas por espacio de muchos años, y habiéndose dado por entero a la escuela con la vocación propia del maestro provinciano, se ofreció y actuó como maestra "ad-honorem", en los cursos que se dictaban para adultos en dicho establecimiento educacional, cargo que desempeñó entre la segunda y tercera década y por el término de diez años aproximadamente.

Logrados más tarde los ascensos a que era merecedora, fue nombrada Directora de la Escuela Nº 247, su adorable "Escuelita del Monte", a la que consagró todos sus afanes y horas libres, que le hicieron conquistar muy pronto la estimación y cariño de toda una barriada y por ende el aprecio unánime de la población.

Maestra por naturaleza en el más amplio sentido de la palabra, su acción educativa no podía limitarse al cargo que se le había conferido ni al círculo estrictamente escolar, sino que proyectó su beneficiosa influencia a otros ámbitos de la cultura y de bien público, desempeñando cargos directivos de primer plano en varias instituciones locales, tal el caso de la "BIBLIOTECA POPULAR BERNARDINO RIVADAVIA", la ex "UNIVERSIDAD POPULAR" , el "HOSPITAL RURAL", "COOPERADORAS ESCOLARES", etc., que la contaron en su seno, y a las que prestigió con su nombre.

Su actuación en la "BIBLIOTECA POPULAR BERNARDINO RIVADAVIA" data desde 1936, en que fuera elegida Secretaria. Al año siguiente pasó a ocupar la Presidencia a perpetuidad, pues hubo de permanecer en ese cargo hasta su último día y por espacio de 24 años consecutivos, en cuyo lapso tuvo que afrontar períodos extremadamente críticos que estuvieron a punto de provocar la clausura del local, pues factores económicos adversos, por un lado, y la apatía e indiferencia de la gente, por el otro, crearon a la entidad una situación insostenible. Los llamados a reuniones o asambleas caían casi siempre en el vacío más absoluto, pero la perseverancia de esta señora y la asiduidad de dos o tres de sus colaboradores más inmediatos, evitaron aquel cierre que hubiera significado una afrenta para la cultura y un poco de vergüenza para el pueblo.

En su vida privada no tuvo hijos propios, pero procedió como si los hubiera tenido, porque quienes la conocieron , la han visto desempeñar el papel de madre con criaturas que gustaba siempre tener a su lado y a las que crió, educó y moldeó a su manera, sin disminuir la personalidad de cada una de ellas.

Para muchos, fue algo asi como la hermana mayor, que en las buenas o en las malas sabía hacerse presente siempre, ya sea para compartir sus alegrías, o como tender su mano amiga en los momentos difíciles, cuya sola presencia tenía la virtud de infundir fé y optimismo.

Su obra, su grandeza de alma y su sonrisa siempre a flor de labios, para ricos y pobres, son dones que hablan elocuentemente de la señoría de esta gran mujer, cuya figura se debe perpetuar incorporando su imagen a la galería de los grandes, porque supo ser en la patria chica la protagonista de esta pequeña historia."

Sin lugar a dudas, haber recorrido esta semblanza, y los diferentes matices de la personalidad de María Passoni, brindándose enteramente con su espíritu tenaz y solidario, nos hace recordar más que nunca un adagio del Padre M. Menapace que reza; "El que se va de este mundo, no puede llevarse nada de lo que consiguió; pero se lleva con seguridad todo lo que dio."


 




MARIA PASSONI de ALONSO 

Nació el 28 de Abril de 1894, en la ciudad de Bell Ville, provincia de Córdoba, donde cursó sus estudios primarios y secundarios; en la Escuela Normal de dicho lugar. Se recibió de maestra en 1913.

Recién recibidas, ella y su compañera Mónica Leiría, solicitan en su Provincia y en la Ciudad de Rosario un puesto de docente para ambas. Son designadas para ocupar cargos de Maestras en la Escuela Fiscal Nº 73 "Adolfo Alsina".

Llegadas a Arroyo Seco, se alojaron en la casa de la Familia de don Albino De Giácomo, donde permanecieron por varios años.

Fue nombrada como Maestra para la Escuela Nocturna, enseñando a jóvenes y hombres ya mayores que la supieron respetar y admirar.

Habiendo sido más tarde designada a ocupar el cargo de Directora de la Escuela Nº 247 "General Martín Miguel de Güemes", se dedicó de lleno ejerciendo como maestra y directora.

Contrajo enlace en 1945, con Casildo Alonso, Jefe de la Estación de trenes, habitando la casa lindera que aún hoy existe en ese lugar.

Con motivo de conmemorarse el día 9 de Julio de 1947 los festejos patrios de nuestra Independencia, y coincidiendo dicha fecha con el 29º Aniversario de la fundación de la Biblioteca Popular Bernardino Rivadavia, fue inaugurado el Edificio Anexo a la Sede Comunal; cedido sin cargo para local de esta Institución. En dicho acto hizo uso de la palabra el Sr. Victorio R. Moscariello, presidente de la Comisión de Fomento y por la Biblioteca, la Sra. Maria Passoni quién agradeció la importante obra en beneficio de la zona. Fue la primera Presidenta de la Comisión del Hospital Rural, siendo Director el Dr. Mansueto Maiorano. También integró la Sociedad de Damas de Beneficencia, que funcionaba en el edificio comunal, para ayuda de los más humildes.

María Passoni ejerció la docencia hasta 1950, año en que se retira para jubilarse.

Falleció el día 25 de Junio de 1961.


Agradecemos a:

Celia Gamboa (Chela); Susana G. Di Mare; Mónica Bolzani; Albina Gladys Molina; Roberto De Giácomo


Material Consultado: Material de Archivo


* Este material fue publicado originalmente en TEMAS & NEGOCIOS .



 

 

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